¿Has pensado alguna vez en lo espectacular que es nuestro planeta Tierra? ¿Te has fijado en la enorme diversidad que ofrece a nivel de geografía, flora, fauna, etc.? No sé si alguna vez te has planteado las posibilidades que nos brinda para la fotografía, pero si no lo has hecho, te recomiendo que pares un momento y pienses en lo abrumadora que puede llegar su belleza y las infinitas oportunidades que os ofrece a ti y a tu cámara.
La fotografía de retrato es un género fotográfico que consiste en capturar las características de un sujeto, ya sea individuo o grupo, mediante el uso de la luz, el fondo, las poses, la técnica o la composición. La historia, el mensaje o la emoción son ingredientes imprescindibles para cualquier fotografía de retrato.
La fotografía lifestyle pretende captar situaciones de la vida real de forma artística. El propósito de este tipo de fotografía es compartir las historias de las personas a través de escenas francas y no escenificadas.
Mientras que un enfoque de estilo de vida se puede tomar en cualquier tipo de fotografía centrada en las personas, muchos consideran que este estilo se representa mejor en las fotos de la familia.
Por otra parte, la principal diferencia entre la fotografía lifestyle y la fotografía de retrato es la forma de participación de los fotógrafos en la escena.
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